Nuestra capital, ofrece al turista una amplia oferta, desde lo histórico, cultural pasando por la gastronomía, hasta lo lúdico, y que no dejará indiferente al visitante.
La Escalinata del Paseo del Óvalo es uno de los monumentos más emblemáticos de Teruel. Fue construida entre 1920 y 1921 para comunicar la meseta sobre la que se asienta el Casco Histórico de Teruel con la estación de ferrocarril.
La Escalinata es en definitiva la imagen resumida de Teruel para el viajero que llegaba a la ciudad y en la actualidad constituye la obra clave del neomudéjar turolense.